¡Buenos días! ☀
Nos levantamos un poco doloridos del trekking de ayer pero nos ponemos rapidito las pilas que a las 10 salimos hacia Pai.
Desayunamos algo en el hostel ya con todo preparadito.
Como siempre el majo Shun Lin está en recepción y cuando nos despedimos sale a la puerta, y como si fuera nuestro papá tailandés (o así nos hizo sentir) nos dice que revisemos si llevamos todo: pasaporte, móvil, cargadores, zapatos...😂 Lo mejor de todo es que nos montamos en la parte de atrás de la furgoneta y vemos cómo espera hasta que recorremos toda la calle y doblamos la esquina diciéndonos adiós con la mano y esa sonrisa tan graciosa. ¡Qué adorable! Queremos un Shun Lin en cada hostel. 😍
Desayunamos algo en el hostel ya con todo preparadito.
Como siempre el majo Shun Lin está en recepción y cuando nos despedimos sale a la puerta, y como si fuera nuestro papá tailandés (o así nos hizo sentir) nos dice que revisemos si llevamos todo: pasaporte, móvil, cargadores, zapatos...😂 Lo mejor de todo es que nos montamos en la parte de atrás de la furgoneta y vemos cómo espera hasta que recorremos toda la calle y doblamos la esquina diciéndonos adiós con la mano y esa sonrisa tan graciosa. ¡Qué adorable! Queremos un Shun Lin en cada hostel. 😍
Menudo viaje nos espera. Un camino de tres horas de baches, curvas y más curvas cada cual más cerrada.
Llegamos a Pai y vemos que nuestro hostel está a 2 km. Nos colocamos las mochilas y bajo el sol y calorazo de las 2 de la tarde se hace el camino más interminable del mundo.
Llegamos completamente mojados pero deshacernos de la mochila nos es suficiente para recuperar fuerzas.
El hostel es muy chuli, a pesar de que está apartado del mundo parece que hay buen ambiente.
Dejamos las cosas como podemos en la habitación (enana para 14 personas) y nos vamos a comer a un sitio baratito que ya teníamos fichado del camino.
Comemos y nos vamos a alquilar unas motos, lo hemos decidido nada más llegar y ver la distancia al hostel. Éstas no son eléctricas así que no parecen tan de juguete y molan más.
Uno de los sitio que ver en Pai es el Cañón. No se si por el cansancio o el calor o ambas no estoy muy motivada con la idea y no tengo grandes expectativas.
Llegamos, aparcamos, subimos y de repente vemos un montón de caminitos estrechos y muy largos hechos en el filo de las zonas más altas, con caídas grandes a ambos lados.
El paisaje es increíble y el camino, aunque un poco peligrosillo ("Guauuu dangerous"), es una pasada. Subimos, escalamos, bajamos... Un montón de polvo y arenilla clara.
Jorge se pregunta cómo se habrá formado esa zona tan curiosa y no quiere respuestas fáciles como por lluvias y erosión, quiere historias originales. Unas mejores y otras peores empieza a oscurecer y es hora de volver.
Ah, no puedo olvidarme de mencionar la valiente hazaña de Paula, que después de tener la cara dolorida por el golpe que se dio en la cascada, sigue a tope sin miedo a nada. Vamos de vuelta a las motos y, yo que voy distraída y haciendo un poco el tonto, lanzó el casco sin querer y rueda acercándose cada vez más al precipicio. Entonces Paula no duda un momento en agacharse pero ve que no lo consigue y se lanza a por él salvándome de tener que pagar otro nuevo. Al filo de caerse (el casco, ella no) lo agarra y todos nos quedamos paralizados por un segundo. 😂
Ya en el hostel una ducha rápida y a cenar.
Después compramos unas cervecitas para relajarnos un poco, nos vamos a las hamacas del hostel y otra vez más con la tontería nos dan las tantas hablando y hablando. A día 35 del viaje todavía tenemos muchos temas de conversación. Nos valen las horas de desconexión del mundo en autobuses y furgonetas con nuestra música, libros y siestas para que el resto del tiempo la comunicación fluya y nos aguantemos bien. 😂
Nos vamos a dormir y aunque el olor a humanidad y las camas no son lo más acogedor el cansancio puede con nosotros.
Pd: Mensaje para la familia de Paula: no os preocupéis que sólo exagero un poco todo. Está bien, se cuida y, por lo general, no se acerca mucho a precipicios. Podéis estar tranquilos.
Un beso,
Án ☀
Paula:deja de salvar cascos. Te queremos enterita!!!!!
ResponderEliminarUy! Llevo varios días sin leeros.
ResponderEliminarQué lugares más bonitos estáis viendo, dais mucha envidia y que bien encontrar a personas como Shun Lin,disfrutad mucho 😘
PD. PAULA VUELVE A CASA YA!!!! Y enterita.😣