Translate our blog.

jueves, 23 de marzo de 2017

Día 47: llegamos a Hoi An

Después de un largo camino de 24 horas en Buses🚃🚃🚃, por fin llegamos a la estación de Hoi An. Como nuestro conductor decidió que la cena y el desayuno no eran importantes, pensamos que lo mejor era comer en la misma estación, aunque posiblemente no fue la mejor idea ya que estaba todo bastante regular 🤐😷, aunque ya con las pilas un poco cargadas y sudando como pollos🐤 nos hacemos el camino hasta la tan esperada villa de Hoi An.

Pasamos por un camino donde el asfalto se derretía del calor y todo alrededor nuestra eran campos de arrozales preciosos. Íbamos​ con las expectativas por las nubes☁, y al llegar se confirman todas nuestras sospechas, con una habitación limpia, grande, bonita y con un baño de 10🔝



Nada más llegar, empezamos con el ritual de higiene íntima que taaaantísima falta nos hace💆, con duchas💦, cortado de uñas largas de los pies💅, y por último llevar toda nuestra ropa a lavar, que ya no nos queda nada limpio.

Todos arreglados y coquetos, y con lo último que nos queda limpio, nos vamos a ver la ciudad en la bicis  que nos dejan en el hostel. Primero vamos hacia la zona del mercadillo, que esta llena de puestos de souvenirs. La calle donde están todos los puestos no es muy grande, y en casi todos hay lo mismo, pero nos enganchan, y allí nos pasamos bien rato buscando regalitos🎁para familia y amigos.

Como la comida no había sido la mejor que habíamos tenido, algunos meriendan unas sopitas vietnamitas 🍜y Jorge prueba el White Rose, que es una comida muy típica de aquí, y le encantó. Otros optamos mejor por un helado🍦, ya que son las 6 de la tarde 😂



De camino a la ciudad antigua pasamos por la zona de bares, donde cada medio metro nos para un relaciones públicas haciéndonos la mejor oferta posible de cócteles🍹 y shisha para llevarnos a su bar. Decidimos que mejor esperar a la noche, que todavía nos quedan cositas por ver.

Llegamos a la entrada de la ciudad y nos paran dos mujeres diciendo que tenemos que pagar para entrar, y nos damos media vuelta ya que habíamos leído que no era necesario. Tenemos que intentarlo, así que vamos hacia el puente que cruza el lago, que también te lleva a esa parte de la ciudad, y para nuestra sorpresa... ¡entramos! Nadie nos pide nada, y ya estamos al otro lado. Eso si, creemos que hay una pequeña parte que no podemos ver sin pagar, pero eso será un problema que solucionar mañana.



Es una parte de la ciudad preciosa, con edificios antiguos y ennegrecidos, llena de pequeñas tiendas de sastres y souvenirs, y todo el cielo inundado de farolillos de miles de colores 😍😍😍Paseamos hasta que se nos hace totalmente de noche, y nos vamos a cenar. Volvemos a la zona del mercadillo, y después de un par de vueltas buscando el restaurante correcto, acabamos sentados donde habían merendado. La cena no fue gran cosa, pero al menos comemos algo.



¡Y ahora si! ¿Dónde están esas bebidas gratis? Volvemos a la zona de bares, y la misma historia... Pero ahora elegimos uno y entramos. Nos dan un cóctel gratis a cada uno y una shisha para fumar. En el bar podemos poner la música que queramos, así que ponemos un par de canciones, bailoteamos un ratito, y pronto estamos todos agotados y sin ganas de seguir. Decidimos que es hora de irse a dormir, descansar, y mañana será otro día 😊

Buenas noches
Albi 🦄

1 comentario:

  1. Merecido descanso de unos días para coger fuerzas y seguir con vuestro viaje.
    Ya solo os quedan 42 días de vacaciones.
    ;)

    ResponderEliminar

¡Muchas gracias por leernos! Ahora, ¿tienes algo que decirnos?