What's up?
Por fin llegó el esperadísimo día de Alba, vamos a hacer un pequeño voluntariado con elefantes 🐘!!!
Rapidito tomamos un café y partimos en una minivan compartida hacia el sur de Chiang Mai. El guía es todo un chistoso y nos hace el viaje muy ameno. Nos explica como los elefantes viven en el santuario ( Elephant Family Sanctuary ), y nos da datos muy interesantes como que los elefantes no tienen estómago, por eso pasan la mayor parte de su tiempo comiendo y echando choronguitos!! Los elefantes son cuidados por Elephant's men y cada uno tiene asignado a uno. Hay dos tipos de elefante en el mundo, el africano y el asiático, este último tipo más pequeño que el africano.
El camino hacia el santuario es precioso, entre la vegetación de la jungla de Tailandia y cruzando algún río sobre puentes de bambú. Y por fin los vemos, son increíblemente grandes, sobretodo comparándolo con nuestras alturas y la de los locales Tailandeses, que hacen parecer que hasta yo sea alto 😎
Empezamos el voluntariado dando de comer a los animalitos, hay hembras y machos, los diferenciamos por la longitud de sus colmillos y hay un bebé elefante que es muy juguetón y da algún que otro beso-ventosa con su trompa! Los elefantes son vegetarianos y lo que mas les gusta son las bananas y cucumber.
Cómo para ir a las chozas de comer hay que pasar por el río, nos damos un bañito con los bichos y nos duchan con sus trompas!
Una comida rica rica de noodles, arroz y todo tipo de stir-fry tailandés y ya estamos listos para continuar el día.
Nos explican que para las infecciones y la digestión de los elefantes lo mejor es darles una masa de sticky rice, sal, banana y piña, así que manos a la obra! Los elefantes lo devoran, parece que la medicina nos ha quedado bastante deliciosa 😋
Y cómo no, había que mancharse, en el santuario tienen una piscina de barro donde los elefantes disfrutan revolcándose con los visitantes y manchándonos de una mezcla entre agua, barro, caca y pis de elefante 😂 Nos lo pasamos en grande revolcándonos, incluso se nos olvida que tenemos a animales de media tonelada bañándose con nosotros!!
Y por último, había que refrotar los bañadores y limpiar a los elefantes de barro, así que otro bañito en el río.
Con unos cazos nos limpiamos los restos de barro y restregamos a los elefantes, que quedan limpitos limpitos a pesar de que su forma de secarse sea echándose arena por encima después de la ducha!
Nos montamos en la minivan y nos sorprenden con una última actividad, un baño en la waterfall más bonita que hemos visto! Incluso saltamos desde las rocas y nuestro guía Tony o Antonio se atreve a saltar desde una roca a más de 10 metros!!
Todos quedamos encantados con esta experiencia diferente, nos encanta que no se maltrate a los animales y que, apesar de que es una actividad de aventura turística, los elefantes vivan los más parecido a lo que podría ser su vida en libertad.
Cuando llegamos a Chiang Mai nos damos una buena ducha y decidimos salir a tomar una Chang, la Mahou o Foster Tailandesa. Una cena no muy sabrosa y continuamos con las cervecitas, en nuestro botellón improvisado conocemos a una chica Catalana que lleva un blog de mochileros por Tailandia y nos cuenta cositas interesantes que podremos hacer de aquí a unos días cuando volvamos a Tailandia desde Vietnam.
Mañana toca madrugar para hacer un trekking por la jungla, pero estamos muy animados despite del día tan largo que hemos pasado y continuamos con la fiesta por Chiang Mai. Unos bailes en el Zoe in Yellow y otros más en el Spicy y... Ya nos despertaremos mañana 😂
Un abrazo,
Jorge 🐐
Por fin llegó el esperadísimo día de Alba, vamos a hacer un pequeño voluntariado con elefantes 🐘!!!
Rapidito tomamos un café y partimos en una minivan compartida hacia el sur de Chiang Mai. El guía es todo un chistoso y nos hace el viaje muy ameno. Nos explica como los elefantes viven en el santuario ( Elephant Family Sanctuary ), y nos da datos muy interesantes como que los elefantes no tienen estómago, por eso pasan la mayor parte de su tiempo comiendo y echando choronguitos!! Los elefantes son cuidados por Elephant's men y cada uno tiene asignado a uno. Hay dos tipos de elefante en el mundo, el africano y el asiático, este último tipo más pequeño que el africano.
El camino hacia el santuario es precioso, entre la vegetación de la jungla de Tailandia y cruzando algún río sobre puentes de bambú. Y por fin los vemos, son increíblemente grandes, sobretodo comparándolo con nuestras alturas y la de los locales Tailandeses, que hacen parecer que hasta yo sea alto 😎
Empezamos el voluntariado dando de comer a los animalitos, hay hembras y machos, los diferenciamos por la longitud de sus colmillos y hay un bebé elefante que es muy juguetón y da algún que otro beso-ventosa con su trompa! Los elefantes son vegetarianos y lo que mas les gusta son las bananas y cucumber.
Cómo para ir a las chozas de comer hay que pasar por el río, nos damos un bañito con los bichos y nos duchan con sus trompas!
Una comida rica rica de noodles, arroz y todo tipo de stir-fry tailandés y ya estamos listos para continuar el día.
Nos explican que para las infecciones y la digestión de los elefantes lo mejor es darles una masa de sticky rice, sal, banana y piña, así que manos a la obra! Los elefantes lo devoran, parece que la medicina nos ha quedado bastante deliciosa 😋
Y cómo no, había que mancharse, en el santuario tienen una piscina de barro donde los elefantes disfrutan revolcándose con los visitantes y manchándonos de una mezcla entre agua, barro, caca y pis de elefante 😂 Nos lo pasamos en grande revolcándonos, incluso se nos olvida que tenemos a animales de media tonelada bañándose con nosotros!!
Y por último, había que refrotar los bañadores y limpiar a los elefantes de barro, así que otro bañito en el río.
Con unos cazos nos limpiamos los restos de barro y restregamos a los elefantes, que quedan limpitos limpitos a pesar de que su forma de secarse sea echándose arena por encima después de la ducha!
Nos montamos en la minivan y nos sorprenden con una última actividad, un baño en la waterfall más bonita que hemos visto! Incluso saltamos desde las rocas y nuestro guía Tony o Antonio se atreve a saltar desde una roca a más de 10 metros!!
Todos quedamos encantados con esta experiencia diferente, nos encanta que no se maltrate a los animales y que, apesar de que es una actividad de aventura turística, los elefantes vivan los más parecido a lo que podría ser su vida en libertad.
Cuando llegamos a Chiang Mai nos damos una buena ducha y decidimos salir a tomar una Chang, la Mahou o Foster Tailandesa. Una cena no muy sabrosa y continuamos con las cervecitas, en nuestro botellón improvisado conocemos a una chica Catalana que lleva un blog de mochileros por Tailandia y nos cuenta cositas interesantes que podremos hacer de aquí a unos días cuando volvamos a Tailandia desde Vietnam.
Mañana toca madrugar para hacer un trekking por la jungla, pero estamos muy animados despite del día tan largo que hemos pasado y continuamos con la fiesta por Chiang Mai. Unos bailes en el Zoe in Yellow y otros más en el Spicy y... Ya nos despertaremos mañana 😂
Un abrazo,
Jorge 🐐
Y a eso lo llaman voluntariado? No os cobran? Pues en España en lugar de voluntariado sería «experiencia con elefantes» y costaría una pasta.
ResponderEliminarUn día muy divertido.😘
Nos gusta llamarlo voluntariado... Pero efectivamente es caro de narices y sí, es una experiencia con elefantes jajaj
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